En las últimas horas del viernes se constituyó una demanda contra Ignacio Nicolás Martín por la “atención”, con graves consecuencias, que habría prestado en un domicilio de la ciudad. El joven impostor declararía mañana
La situación de Ignacio Nicolás Martín (19), conocido popularmente como el médico trucho que trabajó para el Centro de Operaciones de Emergencias (COE) y el Municipio, podría complicarse aún más si se comprueba la denuncia por “mala praxis” que se radicó a última hora del pasado viernes en los Tribunales de Río Cuarto. Se trata de la primera acción de este tipo y se suma a las que ya hicieron el Ministerio de Salud de la Provincia de Córdoba y el Consejo de Médicos por, entre otros delitos, el ejercicio ilegal de la medicina.
Según pudo confirmar Puntal, la demanda contra Martín se concretó ante la Fiscalía de Primer Turno, a cargo del doctor Pablo Jávega, ya que es la dependencia judicial que estaba de turno en ese momento. Sin embargo, por ahora no se sabe quién la investigará, debido a que el expediente todavía no empezó a analizarse. Además, no se descarta que pueda ser girado al fiscal Daniel Miralles, quien desde el lunes 1° de febrero está trabajando sobre la causa original.
Si bien hay un fuerte hermetismo alrededor de la acusación por “mala praxis”, trascendió que estaría vinculada a la “atención” que el falso médico habría prestado en un domicilio particular, ante un llamado telefónico dirigido a una persona relacionada al Centro de Salud de calle Cabrera.
El paciente que habría necesitado la visita de un médico sería un joven de 29 años con antecedentes cardíacos que, después de un paro y tras los intentos de reanimación, habría fallecido. De todas formas, la versión no ha podido ser totalmente confirmada, por lo que se espera que en las próximas horas haya más definiciones sobre el caso.
Ignacio Martín fue detenido el jueves pasado en su domicilio de Córdoba capital. Ese día, después de las 21 horas, llegó a Río Cuarto. Desde entonces, permanece alojado en la alcaidía de la Unidad Departamental de la Policía.
Hasta el momento, el joven está imputado por uso ilegal de documento público, uso ilegal de título, ejercicio ilegal del arte de curar y ejercicio ilegal de una profesión. En ese marco, mañana podría declarar ante Miralles.