En pocos minutos, las calles de la ciudad y los barrios aledaños quedaron convertidos en ríos blancos. Los vecinos aseguran que cayó piedra por al menos 15 minutos. Cayeron 70 milímetros en media hora.
El responsable del voluntariado de Defensa Civil, David Lorré, detalló que el temporal provocó voladuras de techo, caída de árboles, muchos cables caídos e inundación de viviendas. Si bien numerosos sectores de la ciudad se vieron afectados, las zonas con mayores complicaciones fueron los barrios San José y Güemes, entre otros.
“Cayeron 70 milímetros de agua en media hora; eso más el granizo dificultó el drenaje y la circulación de los vehículos de emergencia”, explicó Lorré.
Cerca de las 21 el agua había bajado en algunos sectores, pero el mayor riesgo es la presencia del cableado en la vía pública, añadió el funcionario municipal.
El Municipio emitió un comunicado solicitando a la población a limitar la circulación, y si fuera necesario salir, aconsejó hacerlo con suma precaución.
