Ingresó el lunes sin signos vitales y tuvieron que reanimarla. Luego descubrieron que tiene lesiones cerebrales y en las retinas. El juez investiga a su papá policía y a su entorno familiar.
El juez Penal 2, Ariel Parrillis, quiere ser sumamente cauto con el caso de la beba internada en el Hospital San Luis. Este lunes, la pequeña de tres meses fue llevada al centro médico por su papá, sin signos vitales. Los médicos lograron reanimarla tras 20 minutos, pero quedó en estado crítico y lucha por su vida en la terapia pediátrica. Un médico que la atendió descubrió que tiene lesiones cerebrales y en las retinas compatibles con el síndrome de “bebé sacudido” (shaking baby), un tipo de maltrato. Por eso, investiga al padre y a todo el entorno familiar para determinar si tienen responsabilidades en lo que ocurrió.
El diálogo con El Diario, Parrillis explicó que la niña ingresó al hospital el lunes a las cinco de la tarde con un paro cardiorespiratorio y que, luego de estabilizarla, los médicos le practicaron un fondo de ojos y una tomografía computada, de donde surgieron las anomalías internas.
Al advertir esas lesiones, el médico de guardia hizo una denuncia el martes. Horas más tarde, la oficina de Relaciones Policiales emitió un comunicado de la Jefatura Central que informaba el pase a disponibilidad y la quita del arma reglamentaria al papá de la beba, sin especificar su cuadro.
Pero Parrillis prefiere manejarse con pie de plomo y no descarta la hipótesis de que las lesiones puedan estar ligadas a “una enfermedad asociada o de una patología preexistente”. Por eso, solicitó estudios para descartar o confirmar esa presunción, un informe detallado del cuadro clínico y se lo encomendó a “un equipo de médicos forenses y pediatras, para descartar enfermedades asociadas y lograr un diagnóstico completo y saber si presenta otras lesiones”, comentó.
Pero hay otro punto. El juez también quiere determinar “con quiénes vive la nena, quiénes la cuidan, dónde viven, en qué condiciones y cómo fue auxiliada”, refirió.
Por ahora, la investigación está en manos de efectivos de la Comisaría 2ª y del Departamento Homicidios.