Los jefes comunales de La Toma, El Trapiche, Villa Larca y Cortaderas explicaron cómo sucedieron los hechos y se pusieron a disposición de las autoridades provinciales.
Luego del anuncio realizado por el gobernador de la provincia, Alberto Rodríguez Saá, durante la emisión del reporte extraordinario de este lunes, los intendentes de La Toma, Ernesto Ali; El Trapiche, Juan Manuel Rigau; Villa Larca; Marcelo Vílchez y Cortaderas; Mario Canali, mantuvieron una reunión con autoridades provinciales para dialogar sobre las fiestas no autorizadas que se realizaron en sus municipios durante la semana de Navidad.
Los encuentros fueron encabezados por el ministro de Justicia, Gobierno y Culto, Fabián Filomena; la jefa del Programa Asuntos Municipales, Eugenia Cantaloube; el fiscal de Estado, Eduardo Allende; y el gerente de San Luis Agua, Nazareno Perroni.
“Los encuentros fueron muy buenos, la idea era escuchar a los intendentes”, comentó Allende.
En El Trapiche y La Toma, las fiestas fueron en el ámbito privado, con y sin fines de lucro, respectivamente. “Según los intendentes, estaban en desacuerdo y molestos con las situaciones, nos pidieron que actuáramos y brindaron su colaboración para esclarecer estos hechos”, señaló el fiscal.
Juan Manuel Rigau, intendente de El Trapiche, explicó que las autoridades locales acudieron al complejo “Maderos”, ubicado en La Florida, en compañía de efectivos de la Policía provincial, y “labraron las actas correspondientes y se dejó sin efecto cualquier movimiento en ese lugar”.
Ernesto Ali, de La Toma, señaló: “Nos pusimos a disposición para colaborar en el esclarecimiento de los hechos, que dan lugar a la violación de los decretos vigentes por motivo de la pandemia”. Asimismo, aclaró: “Ningún funcionario público de mi gabinete participó de la fiesta”.
Marcelo Vílchez, de Villa Larca, expresó: “Contamos los hechos en nuestro camping, que no fue de tanta magnitud, no hubo tanta gente. Hay muchas cosas que corregir, estamos en ese camino trabajando con el Comité de Crisis”.
