El expresidente atacó al actual mandatario y aseguró que es el peor primer año de un gobierno desde la recuperación de la democracia. Además afirmó que los dirigentes miran para otro lado ante las necesidades de los ciudadanos.
El expresidente Eduardo Duhalde aseguró que al presidente Alberto Fernández “le gusta que lo maltraten” en una entrevista radial. Sus declaraciones se dan como respuesta al discurso que dio la vicepresidenta Cristina Kirchner ayer donde mandó a “buscar otro laburo” a los ministros y legisladores oficialistas que “tengan miedo”.
Decir eso “es una falta de respeto absoluta al Presidente. Le gusta que lo maltraten. Esto no es un ninguneo, es peor, es atacar al Presidente“, aseguró Duhalde.
“Estamos atravesando lo que es, para mi criterio, el peor primer año de todos los gobiernos desde la recuperación de la democracia“, agregó el expresidente.
Desde su perspectiva: “cuando la crisis se agudiza, en vez de darse cuenta de que hay que hacer, hacen otra cosa. Quién puede entender que en la Argentina trabajadores humildes no podían entrar a su provincia y las dirigencias miraban para otro lado, es una cosa increíble de un Gobierno de origen popular. Eso no puede suceder”.
Además, consideró que “las decisiones que se toman cada vez son peores” y aseguró que muchos funcionarios tienen mucho conocimiento académicos pero poca experiencia.
El expresidente citó a Chile como ejemplo y llamó a hacer una coalición legislativa porque sino “no hay salida en la Argentina y será responsable de una matanza. ¿A donde tenemos que llegar para que los dirigentes se den cuenta que hay que acordar?”.
Respecto al rumor de cambios en el gabinete, sobre los que también comentó el diputado Eduardo Valdés, aseguró que este “es muy cercano a Alberto. Si lo dijo, lo dijo con acuerdo con Alberto, conociendo su historia”.
No es la primera vez que Duhalde critica a Fernández. Hace 20 días comentó que le estaba pasando lo mismo que a Fernando De la Rúa. Ese día dijo: “Creo que está demasiado golpeado. Yo lo viví eso con De la Rúa, nos dábamos cuenta que no escuchaba, que estaba perdido”.
Además, afirmó que la palabra del presidente “está devaluada porque dice cosas que después no se cumplen” y que “tiene una mirada sectaria”. “No entiende que no está bien, me parece que es un buen tipo pero no está como tiene que estar un presidente”, aseguró.