El informe elaborado en la Universidad Austral sostiene que no tienen acceso a alguno de los servicios básicos como agua, gas o cloacas. El 20% viven en condiciones de hacinamiento. Más de un tercio de los niños de 3 y 4 años nunca asistió a un establecimiento educativo formal
Un informe generado en la Universidad Austral reveló las duras condiciones en las que viven millones de niños y niñas en Argentina: más del 60% de los menores de 4 años del país crecen en condiciones habitacionales precarias, con escaso acceso a educación y salud.
Así lo señala el informe titulado “Primera Infancia en Argentina: Un análisis multidimensional de desafíos y oportunidades”, análisis multidimensional del Observatorio del Desarrollo Humano y la Vulnerabilidad de la Universidad Austral.
Presentado en el marco del Día de la Niñez, el trabajo fue elaborado por la Magíster María Sol González, investigadora y becaria doctoral del CONICET en el Instituto de Ciencias para la Familia de la Universidad.
A su vez, está basado en datos recientes de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) del INDEC y la Encuesta Nacional de Niñas, Niños y Adolescentes (MICS) de UNICEF; poniendo en evidencia los desafíos críticos que enfrenta la niñez en áreas fundamentales como la educación, la salud y el hábitat.
Conclusiones
En cuanto a las principales conclusiones que entrega el informe, este recuerda que la Ley Nacional de Educación garantiza el acceso universal a la educación inicial para todos los niños y niñas desde los 45 días hasta los 5 años de edad. Sin embargo, el trabajo revela que “más de un tercio de los niños entre 3 y 4 años nunca asistió a un establecimiento educativo formal, exponiendo una grave brecha en la preparación para etapas educativas posteriores”.
Esta situación afecta especialmente a los sectores más vulnerables, “donde el acceso a la educación de calidad sigue siendo un privilegio y no un derecho”.
Por su parte, otro de los grandes desafíos es el acceso adecuado a servicios de salud. Según el informe, “la mitad de los niños de entre 0 y 4 años en Argentina depende exclusivamente del sector público para su atención médica, careciendo de obra social o cobertura privada”.
Este último dato se agrava con el hecho de que, en el último año, casi 7 de cada 10 niños no realizaron controles oftalmológicos y la mitad no recibió atención odontológica. Las cifras reflejan un sistema de salud insuficiente para atender las necesidades básicas de la primera infancia.
Acerca de las cuestiones habitacionales, las condiciones de vivienda en las que crecen los niños en Argentina son preocupantes: casi tres de cada 10 niños viven en hogares con materiales precarios en techos o pisos, mientras que dos de cada 10 lo hacen en condiciones de hacinamiento.
El informe expresa además que más del 60% de los niños no tienen acceso a alguno de los servicios básicos como agua, gas o desagües cloacales, lo que compromete su salud y desarrollo integral.
Por todo lo detallado, el Observatorio del Desarrollo Humano y la Vulnerabilidad de la Universidad Austral remarcó que los datos presentados son “un llamado urgente a la acción para las autoridades y la sociedad en su conjunto. Invertir en la primera infancia es la estrategia más eficiente para garantizar un futuro próspero para el país”.
No obstante, “esta inversión debe traducirse en políticas públicas efectivas y en la implementación de programas que aborden de manera integral las múltiples carencias que afectan a la niñez en Argentina”.